miércoles, 27 de junio de 2012

"El corcho". Enrique Mariscal.

 Hace años, un inspector visitó una escuela de primaria. En su recorrido observó algo que le llamó la atención: Una maestra estaba atrincherada atrás de su escritorio, los alumnos hacían una gran desorden; el cuadro era caótico. Decidió presentarse: 
- ¿Permiso?. Soy el inspector de turno.....¿Algún problema?.
- Estoy abrumada señor, no sé qué hacer con estos chicos...No tengo láminas, el Ministerio no me manda material didáctico, no tengo nada nuevo que mostrarles ni que decirles.
El inspector que era un "docente de alma", vio un corcho en el desordenado escritorio, lo tomó y con aplomo se dirigió a los chicos:
- ¿Qué es esto?.
- Un corcho, señor, gritaron los alumnos sorprendidos.
- Bien, ¿de dónde sale el corcho?.
- De la botella, señor. Lo coloca una máquina...
- Del alcornoque...
- De un árbol...
- De la madera..., respondían animosos los niños.
- Y ¿qué se puede hacer con madera?, continuaba el entusiasta docente.
- Sillas...
- Una mesa...
- Un barco...
- Bien, tenemos un barco. ¿Quién lo dibuja?.
- ¿Quién hace un mapa en el pizarrón y coloca el puerto más cercano para nuestro barquito?.
- Escriban a qué provincia argentina pertenece.
- Y ¿cuál es el otro puerto más cercano?. ¿A qué país corresponde?.
- ¿Qué poeta conocen que allí nació?.
- ¿Qué produce esta región?.
- ¿Alguien recuerda una canción de este lugar?.
Y comenzó una tarea de geografía, de historia, de música, de economía, de literatura, de religión, etc.
La maestra quedó impresionada.
Al terminar la clase, le dijo conmovida:
- Señor, nunca olvidaré lo que me enseñó hoy. Muchas gracias.
Pasó el tiempo.
El inspector volvió a la escuela y buscó a la maestra. Estaba acurrucada atrás de su escritorio, los alumnos, otra vez, en total desorden...
- Señorita....¿qué pasó?. ¿No se acuerda de mí?.
- Sí señor, ¡cómo olvidarme!. ¡Qué suerte que regresó!. NO ENCUENTRO EL CORCHO. ¿Dónde lo dejó?.

sábado, 9 de junio de 2012

"Prácticum 2012".

Un año más, he tenido en clase una alumna de prácticas y un año más ha sido una experiencia enriquecedora y gratificante. Antes de terminar dicho período, Cristina nos dejó  un cuento breve en el que contaba su paso por nuestra clase. Esperamos que os guste.



"LA MAESTRA MIEDOSA".

Érase una vez  una maestra llamada Cristina, que tenía una peculiaridad:
 Le daba miedo dar clases.
A la seño le habían contado que debía trabajar con una bruja, Ángeles Lara, pero ella no se lo creyó.
El primer día que llegó al colegio, estaba muy nerviosa. Caminando por sus pasillos, de repente, empezó a escuchar música y decidió ir a ver de dónde provenía. Cuando llegó al lugar, se quedó horrorizada. Allí había Pitufos, Brujas, y hasta "¡El hombre del saco!". Entonces, Cristina, se marchó muerta de miedo.
Al día siguiente debía volver al colegio, pero ya tenía que comenzar a dar clases en el aula de 1ºA. Cuando entró y vio a la seño Ángeles gritando, pensó: "Pues creo que esta seño sí que es una bruja".
La seño Cristina, muerta de miedo, estuvo varios días sentada en una mesa sin tan siquiera moverse.
Varios días después, ella comenzó a dar clases, aunque no lo hacía muy bien......porque tenía mucho, mucho miedo.
La seño Ángeles la animaba mucho y ella empezó a pensar a que no era "tan bruja" como parecía.
Llegó un día en el que los alumnos despedían a un profesor llamado Esteban. Este tenía pinta de "chulito", se ponía en una esquina de la clase y ahí se quedaba. Entonces le preguntó a la seño Ángeles que por qué hacía eso y ella le dijo: "¡Ala, tú no le hagas caso, déjalo que está en "estado catatónico grave"!. Entonces, Cristina se empezó a reír. Por primera vez no tenía miedo.
Pasaron los días y poco a poco, los niños empezaron a darle muchos besos, abrazos y regalos. En este preciso instante, es cuando se dio cuenta de que sus alumnos eran los mejores que podía tener porque gracias a ellos y a la seño Ángeles, esta señorita llamada Cristina, pudo empezar a dar clases.


Cristina Butrón Osorio.